Por fin, no mas pollo frito, hamburguesas y taco bell...
La Isla del Padre estuvo chingona, como podra contarles Juan, pero ese pinche país no vale madre, en mi opinión. Aunque las texanas estan dignas de verse.
La rutina era mas o menos así:
Despertar a las 7:30, ir a la escuela (~30 min caminando), clases hasta las 5, regresar al hotel , ir directo a la playa, despues ir a cenar (comida rapida), comprar cerveza y dormir a las 2 -3 de la mañana para despertar jodidos e ir de nuevo a clases...
Luego de un encuentro cercano con las ondas gravitacionales, tengo un mes de vacaciones en Merida. Voy a aprovechar para comer todo lo mexicano que pueda antes de irme.
Por cierto, los geniecillos de DHL perdieron mi carta de aceptacion, asi que tengo que esperar a que me la manden de nuevo.
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